Las pechugas de pollo al horno con queso suenan increíbles solo con su nombre. Pero incluso suenan deliciosos cuando los comes: la corteza cursi y mantecosa es increíblemente crujiente. Dentro de esa corteza hay pollo tierno que se mezcla maravillosamente con los fuertes sabores a nuez del queso cheddar y el parmesano. Las pechugas de pollo al horno con queso son el tipo de plato principal que te hará recostarte en tu silla con un suspiro de felicidad... ¡y pensar en la próxima vez que puedas prepararlas!
Ingredientes
- 1 taza de pan rallado, simple
- 1/2 taza de queso cheddar, rallado
- 1/4 taza de queso parmesano, rallado
- 1/3 taza de mantequilla sin sal, derretida
- 1 / 2 cucharadita de cebolla en polvo
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 4 pechugas de pollo, deshuesadas y sin piel
- sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
Direcciónes
Paso 1 -Precaliente el horno a 350 grados F.
Paso 2 -Engrase una cacerola de 9×13 pulgadas.
Paso 3 -En un plato bajo y poco profundo combine el pan rallado y los quesos cheddar y parmesano.
Paso 4 -En una sartén pequeña sobre la estufa a fuego medio-bajo, derrita la mantequilla.
Paso 5 -Agregue la cebolla y el ajo en polvo a la mantequilla derretida y mezcle bien.
Paso 6 -Transfiera la mezcla de mantequilla a un segundo plato bajo y poco profundo.
Paso 7 -Sazone las pechugas de pollo con sal y pimienta por ambos lados.
Paso 8 -Cubra el pollo con la mezcla de mantequilla por todos lados, luego presiónelo en la mezcla de pan rallado hasta que esté completamente cubierto.
Paso 9 -Coloque el pollo cubierto de pan rallado en la cacerola engrasada.
Paso 10 -Espolvorea la parte superior del pollo con el exceso de pan rallado, presionando ligeramente para que se adhiera.
Paso 11 -Rocíe el exceso de mezcla de mantequilla sobre el pollo.
Paso 12 -Hornee hasta que el pollo esté cocido a 165 grados F en su punto más grueso, aproximadamente de 35 a 45 minutos.
Paso 13 -¡Servir caliente!