¿Alguna vez hay un mal momento para disfrutar de las galletas caseras? ¿Hay alguna comida en la que no quepan galletas hojaldradas, mantecosas y esponjosas? Evidentemente, la respuesta a esa pregunta es no. Las galletas caseras combinan bien con todo, ya sea que quieras un bocado con mantequilla con huevos y tocino o un cazo para salsas y jugos. Antes de que te des cuenta, los estarás sirviendo con cada comida... ¡y no escucharás ninguna queja!
Ingredientes
- 2 tazas de harina para todo uso sin blanquear
- 1 cucharada de levadura en polvo sin aluminio
- 2 cucharaditas de azúcar granulada
- 1 / 4 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/2 cucharadita de sal
- 7 cucharadas de mantequilla sin sal, muy fría
- 1 taza de suero de leche, frío
- 1 cucharada de mantequilla, opcional, derretida
Direcciónes
Paso 1 -Precaliente el horno a 450 grados F.
Paso 2 -Prepare una bandeja para hornear con papel pergamino o un tapete de silicona reutilizable para hornear, si tiene uno.
Paso 3 -En un tazón o batidora, combine la harina, el azúcar, el polvo para hornear, el bicarbonato de sodio y la sal hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados.
Paso 4 -A continuación, corta las 7 cucharadas de mantequilla fría en cubos. Trate de mantener la mantequilla lo más fría posible, ya que la mantequilla fría le dará una mejor textura y sabor a la masa y más capas hojaldradas a las galletas. Si empieza a derretirse demasiado, vuélvelo a meter en el frigorífico o en el congelador hasta que se enfríe de nuevo.
Paso 5 -Agregue los cubos de mantequilla fría a la mezcla de harina y mezcle con un cortador de masa hasta que solo queden pequeños grumos, aproximadamente del mismo tamaño que los guisantes.
Paso 6 -Crea un pequeño pozo en el centro de la mezcla de harina y vierte el suero de leche en el pozo.
Paso 7 -Incorpora el suero de leche a la mezcla con una espátula hasta que esté combinado.
Paso 8 -Presione ligeramente la masa para unirla por completo y luego déjela caer sobre una superficie plana ligeramente enharinada.
Paso 9 -Extienda la masa en forma de rectángulo grande, de aproximadamente 10×9 pulgadas.
Paso 10 -A continuación, dobla la masa por la mitad y repite el proceso unas cuantas veces más. Este plegado, llamado laminar la masa, ayuda a colocar capas de mantequilla para garantizar un sabor rico y escamoso en todas partes. La forma del rectángulo final debe ser de aproximadamente 9×4 pulgadas y aproximadamente 1 pulgada de grosor.
Paso 11 -Con un cortador redondo, haga unas 8 rondas en la masa.
Paso 12 -Transfiera la masa de galletas a su bandeja para hornear previamente preparada, dejando suficiente espacio entre ellas para que las galletas se expandan en el horno.
Paso 13 -Utiliza los restos de masa para enrollar y doblar más galletas, colocándolas en la bandeja de horno de la misma forma.
Paso 14 -Luego, hornea las galletas en el horno hasta que estén doradas, aproximadamente de 11 a 13 minutos.
Paso 15 -Unte la parte superior de las galletas con mantequilla derretida para darle más sabor.
Paso 16 -Servir caliente.