¡Los pasteles de desayuno durante la noche están tan subestimados! ¿Quién no quiere despertarse, esperar 30 minutos y luego disfrutar de un abundante y abundante desayuno? ¡Eso es lo que obtienes con la sabrosa cazuela de croissant para el desayuno! Simplemente mezcle todos los ingredientes, como el jamón salado, el queso suave y el brebaje de huevo picante en una sartén, los enfríe en el refrigerador durante la noche y ¡ya estará listo a la mañana siguiente! Es perfecto para un día de descanso o incluso cuando no tienes mucho tiempo. ¿Ver? ¡La sabrosa cazuela de croissant para el desayuno es una prueba de que este tipo de platos son la mejor manera de comenzar el día!

Ingredientes
- 6-8 croissants medianos, partidos por la mitad
- 8 onzas de jamón curado o restos de jamón cocido, cortado en tercios
- 6 onzas de queso suizo o queso gruyere, rallado
- 4 huevos grandes
- 1 taza de leche media y media o entera
- 1 1/2 cucharadas de mostaza Dijon
- sal al gusto
- azúcar en polvo, al gusto
Direcciones
Paso 1 -Cubra ligeramente una fuente para hornear de 9×11 pulgadas con aceite en aerosol.
Paso 2 -En el plato preparado, agregue los trozos de croissant y coloque los trozos de jamón alrededor de ellos, luego espolvoree con el queso.
Paso 3 -En un tazón pequeño, bata los huevos, la mitad y mitad, la mostaza de Dijon y la sal.
Paso 4 -Vierta la mezcla de huevo sobre la mezcla de croissant.
Paso 5 -Cubra el plato con papel de aluminio y enfríe en el refrigerador durante al menos 30 minutos y hasta toda la noche.
Paso 6 -Precaliente el horno a 350 grados F.
Paso 7 -Hornea la cazuela, tapada, durante 20 minutos.
Paso 8 -Retire el papel de aluminio y hornee hasta que la cazuela esté caliente, burbujeante y la parte superior dorada, aproximadamente de 10 a 15 minutos.
Paso 9 -Deja reposar la cazuela durante 5 minutos.
Paso 10 -Espolvorea la cazuela con el azúcar glass.
Paso 11 -Servir.